Como una «oportunidad que se le presenta a los estacioneros para hacer una nueva distribuidora o para intentar comprar la de Petrobras» vio Daniel Añón el tema de la salida del sello de Uruguay. Sin embargo el directivo fue enfático al aclarar que no se trata de una decisión corporativa de la gremial que preside, que dijo no tomará posición alguna: “Nuestra tarea es  defender a las Estaciones de Servicio”, sostuvo.

Añón  no descartó la idea de hablar –en forma personal y por decisión de cada operador – sobre la posibilidad de formar una compañía distribuidora de combustible “pero hay que asesorarse bien y eso lleva su tiempo”.

DIFÍCIL PARA UNA PETROLERA EXTRANJERA

El presidente de UNVENU dijo ayer lunes a Surtidores, que para una petrolera extranjera el  mercado uruguayo no resulta tentador al tiempo que recordó que la tendencia en el continente es exactamente al revés “porque casi todas se están yendo de América» sentenció el jerarca.

“Las condiciones en que se encuentra el mercado de combustibles«, en un contexto en el que la propia Petrobras y Axion están en juicio contra Ancap desde octubre de 2017,  ante la modificación el esquema del negocio de la distribución de combustibles, que varió el modelo anterior de margen de ganancia para las distribuidoras y las Estaciones de Servicio, no resulta atractivo para una petrolera extranjera además de que esto supone que la venta sea «compleja», porque aún no fue anunciado “si se va a vender el paquete entero con todas las estaciones y sus contratos, si se venden con el juicio a Ancap o sin el juicio«, expresó Añón a nuestro Portal.

Por otra parte el presidente de UNVENU cree que “si se concretara una inversión extranjera, probablemente sería de capitales latinoamericanos”

CONTEXTO DE CRECIENTE HOSTILIDAD

En tanto ayer los principales de Petrobras en Uruguay y el Director Nacional de Energía Ruben García, estuvieron reunidos por espacio de tres horas. El jerarca de gobierno que  quería conocer de primera mano las razones que llevaron a la petrolera a retirarse de nuestro país, explicó a la salida de dicha reunión que “lo que formalizaron es una decisión estratégica de Petrobras a nivel sudamericano, y Uruguay está englobado en esa decisión, pero no es una decisión particular ni mucho menos”. Y agregó que “el gobierno no tiene nada que ver”.

Poco antes de esta reunión, Petrobras había emitido un comunicado en el que denunciaba un “contexto de creciente hostilidad” contra la empresa en el país, “que culminó con un control obrero por el sindicato del gas, a pesar de una prohibición judicial expresa”.

En el mismo comunicado aclaró que durante el proceso de venta seguirá desarrollando sus negocios «como lo viene haciendo, y cumpliendo con las obligaciones asumidas con colaboradores, clientes y proveedores«.

Específicamente sobre sus aún controladas Conecta y MontevideoGas, Petrobras sostuvo en el mismo comunicado, que está pendiente de los resultados de las discusiones con el Estado uruguayo “para la efectiva recomposición de la ecuación económico-financiera de las concesiones del gas natural”.